Cuidado de la piel según la edad

De 15 a 20 años, durante esta época el cuerpo experimenta grandes cambios hormonales, que se reflejan en la piel y tienen aspectos positivos y negativos. Para que en la adolescencia la piel tenga el brillo natural de una piel sana y joven, es necesario recurrir  a una buena limpieza y a una alimentación baja en grasa.

A los 20 años, la piel está en sus mejores momentos: suave, tersa y radiante, ya que el acné adolescente normalmente desaparece. Estos son los mejores años para desarrollar hábitos de belleza saludables, que prolonguen  la juventud de la piel, como nunca dormir con maquillaje, protegerse del sol, usar humectante  y crema para los ojos.

A los 30 años, la piel empieza a cambiar, por lo que requiere más cuidado: usar humectantes con ingredientes activos para tratar las líneas de expresión; crema para los ojos con retinol; limpiarla y exfoliarla, usando ingredientes como el ácido glicólico, o ácidos alfa hidróxidos; usar protector solar, para evitar las manchas y arrugas prematuras, ya que la piel generalmente se vuelve más delicada y tiende a sentirse seca; tomar suficiente agua y comer saludablemente.

A los 40 años, se empieza a ver inevitablemente los signos de la edad: piel flácida, líneas de expresión pronunciadas y arrugas. Es ahí cuando debemos cuidar la piel en serio y visitar a un dermatólogo, para corregir algunos problemas; usar tratamientos para humectar, especialmente aquellos que tienen retinol o vitamina C, dependiendo de las necesidades de la piel.

A los 50 años  y en adelante, la piel pierde elasticidad y los años de descuido  tomando del sol se hacen evidentes en forma de anchas y pecas. En esta edad, la rutina es similar a la de los cuarenta, pero además es necesario comer saludablemente, asegurándonos de que estamos ingiriendo las cantidades necesarias de calcio para no perder estatura y aún más peligroso debilitar los huesos.

Afortunadamente hoy  cincuentas y sesentas, son sólo una extensión de la juventud;  la clave está en mantenernos activos y vitales, cuidando de la salud.